sábado, 19 de mayo de 2007

Ángeles Caídos

José Luis López nos trae una nueva historia en formato librojuego, pero esta vez cambia de género para introducirse de lleno en la novela negra. Se trata del primer librojuego basado en Slang, el juego de rol publicado por Nosolorol Ediciones.

En Ángeles Caídos encarnas al agente Delgado, un policía atormentado que malvive en una pensión tras haberse separado de su mujer
. A Delgado siempre le asignan los casos que nadie quiere resolver. Esta vez se trata de una prostituta oriental que ha aparecido muerta en un callejón. La historia de siempre. Nadie va a echarla en falta. Pero lo que Delgado no sabe es que algo muy gordo se esconde tras este asesinato. ¿Podrá llegar a descubrirlo?

Como se ve, es el típico argumento que uno puede encontrarse dentro del género negro, y que hará las delicias de los amantes de este tipo de novelas. Cuando uno va adentrándose en la historia tiene la sensación de que esta hubiera sido una buena película: misterio, asesinatos, acción, persecuciones... no falta ni un solo elemento que nos permita catalogar esta obra dentro de su género.

Ángeles Caídos incluye una novedad dentro del formato librojuego: la narración en primera persona. Este recurso permite al lector introducirse fácilmente en la piel del protagonista y entender su personalidad y sus motivaciones. Además, representa una reminiscencia a algunas de las películas del género en las que el propio protagonista narra la historia con voz en off, hecho que nos acerca aún más al ambiente propio de este género, y que por tanto considero todo un acierto.

Este es, a todas luces, un librojuego para adultos, lo cual resulta bastante atípico para este formato; pero no es el primero de este tipo que se publica en España. Timun Mas publicó en 1987 una serie de cinco librojuegos llamada Barcelona máxima discreción. La serie, dedicada a un público adulto, estaba escrita al estilo Elige tu propia aventura, es decir, carecía de reglas de juego y solo había que escoger entre varias opciones, y podría incluirse dentro del género pulp-negro, tan propio de las películas de Tarantino.

Pero volvamos a la obra que nos ocupa. Las reglas parecen bastante acertadas y apropiadas, ya que potencian el ritmo vertiginoso de las escenas de acción. Son una versión simplificada de las reglas de Slang. Tienes ocho habilidades entre las que repartes cierta cantidad de puntos, de manera que todas tengan entre 0 y 3 puntos. Estas habilidades tienen que ver con la conducción de vehículos, manejo de armas de fuego y cosas por el estilo. También debes elegir unos rasgos de personalidad de una lista. Tu personaje puede ser listo, guapo, violento, frío... a tu elección. Se usan dos dados de seis caras, de los cuales uno es el positivo y otro el negativo (el sistema les resultará muy familiar a quienes hayan jugado a juegos de rol como Feng Shui o hayan usado el reglamento de Fudge). De esta forma, cuando se realiza una tirada, se obtiene una puntuación entre -5 y +5. A esta se le añaden varios modificadores como la dificultad de la acción y tu puntuación en una habilidad determinada y otros que dependen de los rasgos que tenga tu personaje. Por ejemplo, si intentas sacar información de una prostituta, puedes encontrarte con que debes hacer una tirada de Diplomacia con dificultad -2, pero si tienes el rasgo Guapo tienes +3 a la tirada. Si tras realizar la tirada y aplicar los modificadores el resultado es 0 o mayor, tienes éxito; si el resultado es negativo, fracasas.
Al principio el sistema de juego puede resultar algo farragoso para los lectores que no estén acostumbrados a usar el tipo de reglas de los juegos de rol, pero en cuanto se juega una partida se le pilla el tranquillo y uno se da cuenta de que, dentro de su simpleza, es un sistema potente, ya que permite cubrir situaciones muy diversas con suma facilidad y los modificadores que inciden en las tiradas pueden hacer que, dependiendo de nuestra elección a la hora de crear el personaje, una misma tirada pueda resultar muy fácil o muy difícil.

En cuanto a la historia, se deja leer fácilmente y ofrece varios finales distintos (aparte de la consabida sección de muerte del personaje, siempre presente en este tipo de librojuegos), lo cual representa un incentivo para tomar decisiones diferentes cada vez que se inicia la aventura. El trabajado árbol de secciones, como nos tiene acostumbrados J. L. López, permite que, una vez descubierto el argumento de la historia, podamos seguir distintas líneas de investigación que nos lleven a cada uno de los distintos finales. Una vez más, el autor cumple con aquello que nos aseguraban en otras series (y que no siempre era cierto del todo) de que cada lectura es una nueva aventura.

Las ilustraciones, muy acordes a este tipo de libro, son a menudo impactantes. Hay en ellas abundancia de negro, muchas veces con extensas zonas totalmente entintadas. Tienen un estilo sobrio y directo que viene muy bien para ambientar una novela policíaca.

En suma, un buen título. Parece que el autor ha estado toda su vida escribiendo este tipo de novelas, cosa que me sorprendió puesto que solo tenía como referencia su serie Leyenda Élfica, de fantasía medieval, género totalmente distinto. La única pega que le pongo a Ángeles Caídos es que puede hacerse un poco corto, ya que las escenas de acción consumen muchos párrafos, aunque también puede deberse a que, una vez que la historia te atrapa, devoras sus líneas con suma facilidad.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Gracias por los comentarios sobre los librojuegos. A este ritmo de actualizaciones diarias, este blog se ha convertido en uno de los "imprescindibles".

El capitán D´Val.

Anónimo dijo...

Por cierto, para aquellos que quieran hacerse una idea de cómo es Angeles Caidos, pueden jugar la serie de minilibrojuegos de La Asesina, que salen cada 2 meses en la revista online de NSR. Por ahora van 2 capítulos y el mes que viene sale el tercero. El link es este:

http://www.nosolorol.com/revista/index.php?nrev=47&nsec=27

Juan Pablo dijo...

Confieso no haber jugado aún ninguna aventura a Asesina... ¡tengo muchos Ljs pendientes! Pero caerá, como los demás.

Por cierto, espero poder hacer pronto el comentario sobre El emisario ;)

EbaN dijo...

Un gran artículo, muy bien explicado todo. Así si que se vende una moto!!